No sé porqué, no sé, no sé… si por mucho que aprete mi amor nunca puede caber en un sobre… y tu lo sabes…
Y ahora llega el verano, y el calor agobiante, y las mañanitas frescas… y también llegan muchas cosas nuevas, y las que han llegado, que no sé muy bien si están aquí o si sólo las veo yo, y la verdad, es todo un poco confuso, porque no sé lo que está pasando… en fin, se supone que todo irá pasando, como tenga que pasar, y será lo que tenga que ser, y todo eso.
Hay momentos en los que nos refugiamos en el pasado, y no nos deja tirar para adelante. La incertidumbre, el miedo… todo eso que nos frena a la hora de tomar decisiones, de ver con optimismo el futuro, y pensar que todos los cambios sirven para mejorar, y sino para aprender de ellos. Hay que ir paso a paso, ya lo dijo el poeta, se hace el camino al andar. Puede ser que no veas el final, pero no por eso hay que echarse atrás.
Si es que yo tampoco sé lo que me digo…